Hoy 14 de mayo, escuchamos reclamos de paz y de defensa de la dignidad de toda persona, de todo pueblo y nación, de toda expresión religiosa
En la mañana del 14 de mayo, el Papa León XIV, en su alocución a los representantes de la Iglesias Orientales, hace un claro llamado a la paz a través del diálogo y del encuentro: "El pueblo quiere la paz y yo, con el corazón en la mano, les digo a los dirigentes del pueblo:¡reunámonos, hablemos, negociemos! La guerra nunca es inevitable, las armas pueden y deben silenciarse, porque no resuelven los problemas sino que los incrementan; porque el que siembra paz pasará a la historia, no el que cosecha víctimas" por ello y para ese logro "la Santa Sede está disponible para que los enemigos se encuentren y se miren a los ojos, para que a los hombres se les devuelva la esperanza y la dignidad que merecen, la dignidad de la paz"; y en ese grito de poner fin a la violencia, subraya que "la Iglesia no se cansará nunca de repetir: que callen las armas". Ni de reconocer y agradecer a todas las personas que desde diversas maneras "tejen hilos de paz".
Y en esta misma mañana, todos los medios recogen también la muerte de Pepe Mújica, una muerte ya anunciada y asumida con dignidad desde meses atrás por él mismo. Prototipo de una coherencia política y de sentido profundo de humanidad, de lucha por los más pobres y desfavorecidos, de una mirada amplia por encima de localismos y cerrazón al diferente, defensor para el rescate y construcción del mosaico cultural en convivencia y en paz.
El mejor homenaje es recoger alguna de sus frases para que nos sirvan de acicate y de señales en nuestro caminar hacia sociedades más justas, inclusivas y dialogantes, donde el valor de la vida y la dignidad de las personas sea lo que tengamos que preservar:
"La paz se debe ver reflejada en el mejoramiento de las condiciones de vida de las comunidades para que no sólo haya confianza en el proceso, sino para que se sienta que valió la pena tanto sufrimiento"
"Para la construcción de la paz, las regiones deben generar valores y ningún valor es más importante que la vida"
"No acompaño el camino del odio, ni aún hacia aquellos que tuvieron bajezas sobre nosotros. El odio no construye. Esto no es pose demagógica, esto no es cosa de andar eludiendo el bulto, esto no es cosa de poner una cara linda; estos son principios, cosas que no se pueden hipotecar"
"No quiero llamarnos América Latina porque no somos solo descendientes de latinos; somos descendientes de negros, de pueblos indígenas, de asiáticos; somos descendientes de todos los pobres y perseguidos del mundo que vinieron a América a soñar con un porvenir"
"Dicen que soy pobre; pobres son los que precisan mucho"
"Yo me dediqué a cambiar el mundo y no cambié un carajo, pero estuve entretenido y le di un sentido a mi vida. Moriré feliz. Gasté soñando, peleando, luchando. Me cagaron a palos y todo lo demás. No importa, no tengo cuentas para cobrar"
Fidel García, secretario general CGJP