Minerales críticos en el centro de la geopolítica
En los últimos 100 años el control y el acceso al petróleo determinó la geopolítica y formó parte del trasfondo de algunas guerras. A los poderosos los preocupaba que el gas y el petróleo llegara de manera regular y sin interrupciones en los centros de producción industrial, la economía dependía de la regularidad de la producción y distribución de estos combustibles.
La preocupación de las élites económicas todavía es significativa, pero las nuevas tecnologías y la nueva economía ligada a "lo digital" incorpora otro elemento tan relevante como el petróleo, los minerales críticos o minerales estratégicos. Materias primas imprescindibles por la transición energética y por todas las tecnologías emergentes. Estos minerales en un tiempo no muy lejano pueden jugar el papel político que ha tenido el petróleo y llegar a desplazarlo. Esta nueva era tecnológica vendrá marcada por la dependencia de ciertos minerales que formarán parte del núcleo duro de las relaciones geopolíticas.
Algunos minerales como el aluminio y el grafito son esenciales en materiales militares como aviones, helicópteros o portaaviones. Del grafito: China controla el 77%, en el caso del aluminio el 60%, cualquier interrupción en la cadena de suministro afectaría la producción de sistemas de armas en la UE. Otros minerales esenciales por la electrónica como: litio, germanio, neodimio, telurio o tantalio, nuevamente China es el principal productor, controla el 93% del germanio, el 80% del tungsteno y el 68% de las tierras raras. China tiene la clave de muchos minerales esenciales por esta nueva economía, el que provoca de Estados Unidos y la UE se aboquen a pactar con otros gobiernos para asegurarse el suministro de estos minerales y mantener su economía.
La Ley de Energía de 2020 de los EE. UU. define un "mineral crítico" como un mineral no combustible o material mineral esencial para la seguridad económica o nacional de los EE. UU. y que tiene una cadena de suministro vulnerable a posibles interrupciones. La Casa Blanca considera que los materiales críticos son esenciales para la seguridad nacional.
Un informe de 2020 de la UE sobre materias primas críticas afirma que hay 7 tecnologías importantes por la defensa: las baterías, pilas de combustible, tecnología fotovoltaica, robótica, drones, impresión 3D y tecnologías de la información y la comunicación y 39 minerales necesarios para su producción. En definitiva, en términos de seguridad, se considera que es imprescindible asegurar el suministro de estos minerales y que cualquier interrupción puede ser susceptible de una respuesta militar.
Hay que tener presente que China compite por la hegemonía mundial con los EE. UU. y al mismo tiempo es la principal suministradora de estos minerales. Los conflictos alrededor de estos minerales estarán en el centro de las relaciones políticas, comerciales o conflictos armados.